Juego de dioses.

 




Fui en busca de los dioses 
para que me hablaran 
de la inmortalidad.
Caminé entre tinieblas 
en busca de leyendas,
celos, traiciones, 
incestos, batallas.
Atravesé bosques helados
mares enfurecidos
por dejar de ser
efímero.
Y, finalmente,
llegué junto a
las divinidades 
y, éstas, me contestaron
que vivían con una 
cadena perpetua,
que se aburrían
en su eternidad, 
y por pasar el tiempo
jugaban a los dados
apostando a ver quien 
de nosotros, 
vulgares mortales,
moría antes.

Comentarios