La tierra tiembla, las montañas empequeñecen
los manantiales fluyen
cuando el caballo empieza a trotar con furia,
revestido de alas, el caballo no solo quiere dominar la tierra,
también los cielos,
el hombre bien conoce su nobleza, y se alía con él
para utilizarlo en sus batallas.
Piensan en su figura en la guerra de Troya,
y vence en la batalla con engaño y astucia.
El caballo, surca mares, y asciende a los cielos
destruye campos, y crea vida.
Las amazonas lo utilizaban para su libertad,
disponiendo a voluntad los hombres.
Tanto puede ser dócil,
como arrasar con todo
lo que se interpone en su camino.
¡Cuánto podemos aprender de él!
Supongo que se puede aprender bastante. Sobre todo su libertad. Un abrazo
ResponderEliminar